Pareciera ayer cuando te miraba a los ojos y gritaba a los cuatro vientos que te amo...
Pareciera ayer cuando te abrazaba fuerte y te sentías poseída y protegida...
Pareciera ayer cuando hacernos el amor era una práctica tan frecuente como lavarse los dientes...
Pareciera ayer cuando gemías incauta de placer enredada en aquellas sábanas que nunca te dejaron escapar...
ES HOY CUANDO NADA QUEDA, NADA PASA... ES HOY CUANDO EL RELOJ Y LA DECEPCIÓN NOS ENCARAN QUE NUESTRO TIEMPO TERMINÓ
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